El estudio analizó por dos años la evidencia chilena y de otros seis países con el objetivo de comparar los estándares internacionales de derechos humanos en los currículos y programas educativos. Un bajo tratamiento de la perspectiva histórica y de memoria y falta de transversalidad fueron parte de los resultados.
¿Cómo están presentes los derechos humanos en la formación escolar de niños, niñas y adolescentes? Esta es la pregunta que es respondida en el análisis realizado por el Centro UC para la Transformación Educativa, CENTRE, encargado por la Defensoría de la Niñez, titulado “Estudio de análisis del enfoque de derechos humanos de niños, niñas y adolescentes en el currículum educativo».
El análisis surge en 2020, a partir de los resultados del Primer Estudio de Opinión de niños, niñas y adolescentes, realizado por la Defensoría, que advirtió sobre una brecha en la forma en que son abordadas estas temáticas en la educación. Para entregar evidencia al respecto, el equipo de investigadores del CENTRE, liderado por el director Ernesto Treviño, realizó un estudio que contó con un análisis secuencial de la literatura internacional, currículums escolares, leyes y decretos en Chile y otros seis países: Argentina, Australia, Colombia, México, Reino Unido y Suecia.
En la primera etapa se analizaron datos documentales de manera cuantitativa. Luego, de forma cualitativa, y a través de la revisión sistemática de la literatura, estos hallazgos fueron discutidos en grupos focales, donde participaron 17 estudiantes de entre 5 y 17 años, con el fin de identificar desafíos e incorporar la mirada activa de quienes aprenden estos contenidos, respecto al enfoque de DD.HH. en la enseñanza.
El estudio comparó el avance en la materia de Chile con países que ya han implementado programas focalizados en alguno de los ámbitos de la educación en DD.HH; ya sea a través de cátedras como educación para la paz, la interculturalidad o la lucha contra las violaciones a los derechos humanos. “Analiza cómo están integrados los DD.HH. en distintos documentos educativos, como planes de formación inicial, el currículum que reciben las escuelas y los estudiantes y, también, planes de formación continua”, agregó Treviño.
Con esto, se observan dos tendencias principales. «La primera es que estos son abordados como contenidos explícitos del currículum educativo, como lo es el caso de Colombia y Argentina», cita el informe. La segunda es su abordaje transversal y mediante distintas disciplinas, como en el caso de Australia, México, Reino Unido y Suecia.
La situación en Chile
Además de analizar los distintos países y sus enfoques en DD.HH en la educación, el estudio comparó estos hallazgos con los currículos chilenos de educación parvularia, escolar, de carreras de pedagogía de cuatro universidades y en 113 cursos ofrecidos por el Centro de Perfeccionamiento, Experimentación e Investigación Pedagógica (CPEIP) para la formación continua.
Se delimitaron tres focos principales: Conciencia y Conocimiento en DD.HH; Vivencia y Experiencia, y Agencia en DD.HH. El segundo enfoque, relacionado a capacidades como el pensamiento crítico, la resolución de problemas y la valoración por la democracia, fue el que predominó en todas las unidades de análisis, desde párvulos hasta la educación continua de docentes y profesionales.
Asimismo, las menciones de este enfoque tienden a aumentar al avanzar en la trayectoria escolar, destaca el informe, “mientras que las de los enfoques de Conciencia y Conocimiento, y Agencia, tienden a disminuir. Así, el enfoque de Vivencia y Experiencia en DD.HH. pasa de un 63% de las menciones en el nivel de 1° a 6° básico, a un 81% en III° y IV° medio”. Situación similar a los cursos del CPEIP, donde alcanza un 76,85%.
En el caso de la educación superior, se analizaron las mallas curriculares de las carreras de pedagogía de cuatro universidades: la Pontificia Universidad Católica de Chile, Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Universidad Andrés Bello, y la Universidad de la Frontera. Aquí también se repite la tendencia, sin embargo, existe una carencia de “menciones explícitas a normas, historia, memoria y violaciones a los DD.HH.”, señala el estudio.
Por otro lado, no se observa un tratamiento transversal de las temáticas en el currículum, siendo la asignatura de Historia, Geografía y Ciencias Sociales el único espacio que incluye explícitamente estos contenidos. Al respecto, para la Defensora de la Niñez, Patricia Muñoz, es vital avanzar en un abordaje más transversal y activo en las salas de clases: “Es indispensable superar la visión de los DD.HH. como un listado y catálogo. Hoy se enseña cuáles son los derechos y nos quedamos en eso, y no nos permite fortalecer la agencia en relación con los mismos”.
Otros hallazgos demuestran que en Chile no existe un marco común sobre cuál es el enfoque que se quiere seguir respecto a DD.HH., y que hay una ausencia en todos los niveles educativos de una perspectiva histórica y de memoria sobre las vulneraciones a los derechos humanos. Al respecto, el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, señaló que queda mucho trabajo por hacer, pero que “no partimos de cero, tenemos hoy día no solo la Ley de Garantías de Derechos de la Niñez, sino que tenemos instrumentos de normativa que orientan la política educativa. Tenemos una arquitectura normativa, y creo que podemos avanzar con ella».
Para una de las investigadoras del estudio, la académica de la Facultad de Educación Carmen Gloria Zúñiga, el documento “es necesario para orientar políticas públicas, y despertó nuestro interés porque requería una óptica transversal (…). Esta visión es necesaria para orientar otros estudios que nos muestren cómo son las prácticas que se vinculan a los DD.HH”.
Descarga el estudio aquí