Esa fue la principal pregunta que intentó responder el webinar “Promoviendo el bienestar escolar y docente”, guiado por la académica de la Facultad de Educación de la UC, Valeria Cabello. Este fue el tercer taller del ciclo de “Apoyo pedagógico en tiempos de COVID-19” y que continuará hasta el 23 de junio.
En tiempos de pandemia y cuarentena, la sala de clases dejó de ser lo que conocíamos. Hoy, el living o el dormitorio de la casa de un estudiante o de un profesor o profesora es el hábitat normal para desarrollar el aprendizaje. En este contexto, ¿cómo velamos por darle continuidad al conocimiento, pero, a la vez, protegemos la socioemocionalidad de las comunidades educativas? Esta fue una de las principales preguntas que se plantearon en el webinar “Promoviendo el bienestar escolar y docente”.
La actividad, realizada el martes 26 de mayo, fue liderada por la académica de la Facultad de Educación UC, Valeria Cabello, y se trata del tercer taller del ciclo de “Apoyo pedagógico en tiempos de COVID-19”, que es organizado por la Línea de Inclusión Pedagógica del Centro de Justicia Educacional, CJE, y el Centro UC para la Transformación Educativa, Centre.
Según Cabello, las clases online serían un camino ideal para conectar con las comunidades, pero no todos los alumnos ni profesores tienen las mismas condiciones de acceso a internet, por ejemplo. Ante estas brechas, la psicóloga en educación entregó tres claves esenciales para potenciar el bienestar escolar y docente: autocuidado, cuidado entre pares y contención de estudiantes.
Autocuidado
“En un avión nos dicen que debemos ponernos la máscara de oxígeno primero y luego ayudar a otros”. Esa analogía utilizó la experta para relevar la importancia del autocuidado como la base del bienestar en una comunidad. Para ello entregó algunas estrategias de cómo establecer límites de horario para tareas laborales, ya que “no es sano trabajar todo el día”. Por eso aconsejó, por ejemplo, no leer correos electrónicos más allá de una hora determinada.
Intentar separar los espacios físicos o, de no ser posible, los momentos en que se realizan tareas determinadas, fue otra de sus recomendaciones. “No todas las familias tenemos la posibilidad de contar con espacios para cada tarea, pero sí podemos separar los momentos”, explicó. También expuso sobre la importancia de conectarse con el cuerpo, dormir bien y validar las propias emociones como el miedo, la angustia, el cansancio y la irritabilidad. “Es importante escucharse auto compasivamente y preguntarse ¿qué puedo hacer? Hay que poner atención a lo que estamos sintiendo”.
Cuidado entre pares
“De esto no salimos solos”, dijo la experta, por eso las redes de apoyo entre pares son esenciales. Pero, ¿cómo apoyar a las y los pares? Preguntándoles cómo están y compartiendo los propios sentimientos, explicó Cabello: “Compartir las emociones puede potenciar una sensación de colectividad, que estamos enfrentando esto todos juntos”. También, recomendó contener a otros sin juzgar y compartir con ellos recuerdos o anécdotas que entreguen alegría.
En cuanto a la labor docente, aconsejó evaluar qué tareas se pueden abordar en conjunto entre docentes y ver qué estrategias les han servido a colegas y cuáles no: “Este no es momento de ser egoístas, estamos en un momento en que la generosidad puede marcar un cambio importante”, dijo. Asimismo, explicó que se debe evitar enviar mails fuera del horario de trabajo -programando, por ejemplo, los envíos en Gmail- y “tratar de agradecer en los correos, sobre todo cuando se lideran equipos escolares”.
Contención de estudiantes
Según Valeria Cabello, para saber cómo ayudar a las y los estudiantes, lo principal es preguntarles qué necesitan. “Quizás necesiten atención y escucha activa. No sólo escuchar lo que me dice, sino que cómo me lo dice y por qué me lo dice. Incluso, muchas veces necesitan ayuda para poner en palabras lo que sienten”.
Si bien, es importante mantener un vínculo pedagógico, las brechas digitales no siempre nos permiten conectar con los alumnos y alumnas de forma online. Por ello, la experta recomendó intentar una conexión por vía telefónica “a través de audios cortos, no como una larga realimentación pedagógica, sino que, en el fondo, que sirvan para que las y los estudiantes sepan que hay una persona atenta a sus necesidades”. Además, las y los docentes deberían ayudar en la contención de sus estudiantes, dice Cabello, ya que “muchos estudiantes están con problemas de atención, desregulados emocionalmente o con problemas familiares” y, por ello, crear un sentido de comunidad y una sensación de grupo puede ayudar a su bienestar socioemocional.
Mira el webinar de Valeria Cabello aquí:
Participa, también, en el taller del próximo martes 2 de junio, donde la Directora de Investigación de la Facultad de Educación UC, Ainoa Marzábal, ofrecerá un espacio de reflexión y guía acerca de los desafíos y decisiones que deberán enfrentar las y los profesores de Ciencias cuando se retomen las actividades presenciales en los establecimientos educativos. Inscríbete aquí.